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ESTA ES LA PRESENTACIÓN DEL LIBRO "Rafael Delgado, Realidad y Mito de un Pueblo", de la autoría de Pedro Enríquez Hdez.

UBICACIÓN DEL MUNICIPIO DE RAFAEL DELGADO, VER.

El municipio de Rafael Delgado, Veracruz, México, se encuentra ubicado en la zona centro del Estado de Veracruz de Ignacio de la Llave, en las coordenadas 18° 49” latitud norte y 97° 04” longitud oeste, a una altura de 1,160 metros sobre el nivel del mar.

Limita al norte con Orizaba; al este con Ixtaczoquitlán; al sur con San Andrés Tenejapan, Tlilapan y Nogales; al oeste con Río Blanco. Tiene una superficie de 39.48 Km2, cifra que representa un 0.05% total de la entidad veracruzana. (Enciclopedia Municipal Veracruzana, Gobierno del Estado de Veracruz, Secretaría Técnica, edición 1998)

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viernes, 6 de febrero de 2009

A mi municipio

I

Cual dulces y blanquísimas champolas
lucen bellas tus cándidas neblinas;
tus invernales aguas cantarinas
ingenuas corren, libres y sin olas.


Eres cuna de múltiples corolas
y de un río con aguas cristalinas,
artífice de flores tan divinas
como nardos y espléndidas gladíolas.


Chiahualpa te llamaron al principio
igual Teposchicoya te llamaste
para ser más tarde San Juan del Río.


Entre lluvias, neblinas y rocío
de esos nombres por fin te alejaste
para ser un moderno municipio.


II


Tus montañas contemplan silenciosas
los jardines repletos de azucenas,
las aves embellecen las escenas
y se tornan tus flores más hermosas.


Se saludan las hierbas olorosas
con las blancas gladíolas tan amenas;
cuando el abril arriba a manos llenas
se transforman tus lindas mariposas.


Tras cada noche silenciosa y muda
el Pico de Orizaba te saluda
con sus enormes mantos de algodón.


También como parte de tus dotes
“Tepoztécatl” resalta los ocotes
cual un poema, canto o inspiración.


III


Yaces como el rincón de la comarca
con elegantes cerros de arboledas,
desde lejos se aprecian como cedas
que destellan verdor el cual te enmarca.


Atezcatitla está por el Oriente,
Tepoztécatl se impone por el Sur,
y a lo lejos, tornándose ya azul,
otra montaña está, por el Poniente.


Salen con alegría de sus hogares
los niños y rebasan los rediles
cuando observan que ya lo jinicuiles
maduraron y caen en los solares.


Chinenes, aguacates y chayotes
ofreces a tu gente sin esfuerzo;
naranjas y guayabas como almuerzo
se las comen también los guajolotes.


Cuando el sol ilumina los caminos
tu gente va al trabajo muy feliz,
cultiva los frijoles y el maíz,
formándose excelentes campesinos.


Todo el mundo trabaja a todas horas
desde que envía la luz el Gran Divino,
primero todos corren al molino
y después al mercado, las señoras.


A veces hay temor por las heladas
que atacan o amenazan los cultivos,
en tu tierra no existen los altivos
pues respetan las lluvias y suradas.


Tu gente es muy jovial y muy sencilla
y se acalora más con el tequila,
le entran los de Tzoncolco y Omiquila
y no se queda atrás ni Jalapilla.


A veces yo recorro cual campeón
tus campos, El Potrero y Las Sirenas;
he visitado igual, sin grandes penas,
Huizachtla, San Isidro y Boquerón.


Yaces como el rincón de mil corolas
con hablantes del náhuatl y español,
hoy alegre grito frente al sol:
¡¡¡ que seas siempre el edén de las gladíolas !!!